En una ciudad con cada vez menos balcones al río que podemos disfrutar los pescadores, el Parque de los Niños sin dudas es una de las mejores opciones que porteños y bonaerenses pueden disfrutar en ámbitos capitalinos. Con el recordado "Abanico" rellenado y una costanera totalmente modificada y llena de enganches, este sitio bien prolijo que limita con Vicente López, tiene la ventaja de su amplia superficie para pescar (sobre todo ahora que no está el Buenos Aires Playa) y contar con estacionamiento y baños públicos.

Hechas esas aclaraciones no menores, vamos a entrar en detalles de la pesca. El pejerrey es la especie que domina el panorama en este momento, pues ya aflojaron los sábalos y carpas que son las vedettes del verano. Eso sí, los que todavía permanecen en actividad -aunque en menor medida que hace un par de semanas- son los doradillos. Para muchos pescadores, una bendición que es promesa de futuro. Para otros desaprensivos, apenas una oportunidad de llevarse un pez más para consumo pese a que en esos portes de 25 a 35 cm son poco menos que una verdadera caja de alfileres por su cantidad de espinas, más allá de que sacrificar un pez que no ha cumplido su ciclo natural reproductivo al menos una vez es un verdadero pecado. Lo cierto es que estos predadores no desdeñan las mojarras que usamos para el pejerrey como carnada. Si son vivas, tanto menor, o si no van bien las saladas.

Para lograr pejes a fondo, es conveniente usar una línea de dos anzuelos con brazoladas de 80 a 100 cm atadas a un esmerillón. Esto garantizará que trabajen libres. A veces, sobre todo cuando hay sudestada y buen volumen de agua, el pejerrey arrima y con un equipo de pejerrey como el que usamos de caña Spinit Proline y Reel Turbo con multifilamento del 0,18, estaremos cubiertos.

Pero ante bajantes pronunciadas, la pesca se aleja y allí sí apelaremos a equipos de lance para poner plomos de hasta 150 gramos río adentro buscando distancias. Aquí el reel Spinit Pro Distance F6000 (de recupero 7 a 1) con 3 carretes de grafito long cast maquinados en aluminio y freno delantero progresivo, nos permitirá tener distintos grosores de nailon en la carga para usar en las más diversas situaciones. Combinarlos con una caña Pro Distance, de 4,20 es lo ideal para tener un buen latigo y ganar distancia. Es clave que la línea sea de dos brazoladas de 80 cm al metro y que a las mojarras que usamos de carnada la atemos de la cola con hilo elástico para que aguanten el lance.

A flote es posible pescar usando líneas de boyas esféricas y anclando el aparejo con mandale, también llamada boya volcadora. Esto permite que el aparejo no se desplace con la corriente, algo que evitará enredos (y conflictos) con otros pescadores.

El peje que sale usualmente va de 25 a 35 cm, pero hay sorpresas mayúsculas. Con paciencia y de preferencia en días de semana que hay menos gente, seguramente tendrá suerte con esta pesca, o también con las clásicas capturas de bagres y patíes usando lombrices como carnada. Vaya y disfrute.

Por: Wilmar Merino