El pescador del Siglo XXI debe ser consciente de que topa actividad humana impacta en la naturaleza y la pesca también puede dejar una huella negativa en los diversos ambientes. Por eso debemos no solo contribuir con buenas acciones no solo para minimizar estas posibles consecuencias, sino también ser parte de las soluciones que ayuden a mejorar los ecosistemas que tantas alegrías nos producen.

Un eco pescador debe seguir siempre estos consejos:

• 1 - Llevarse su basura: Cuando vamos de pesca también llevamos alimentos, bebidas, cremas protectoras para el sol, botellas, bolsas de nailon, etc. Nada de eso debe quedar en el ambiente que visitamos, ni siquiera peces capturados allí que por algún motivo sacrificamos y no vamos a usar, o sus desperdicios si es que los fileteamos. Es más, podemos contribuir a dejar mejor el lugar si llevamos una bolsa de residuos y recogemos basura, colillas de cigarrillo, latas, y todo lo que no corresponda al ambiente natural visitado.
• 2 - No dejar nailon: Son frecuentes en toda pesca las galletas, enganches, etc. Tratemos de no dejar nailon en los diversos ambientes, rescatando líneas con tanzas sueltas del agua de ser posible y recogiendo todo resto de nailon nuestro o ajeno que veamos. Han sido frecuentes los casos de aves enredadas en estos hilos (como se ve en costanera norte porteña) que han terminado perdiendo la vida o produciéndose graves mutilaciones al tratar de desenredase de estas madejas.
• 3 - Cuidados del pescado: Siempre que sea posible aplastemos las rebabas de los anzuelos para producir el menor daño posible a las capturas, especialmente si la idea es soltarlas. Esta práctica junto con la correcta manipulación del pez (con las manos húmedas, sin sobre agotarlo en la pelea y si es posible sin sacarlo del agua al desanzuelar) harán que la sobrevida del mismo sea mucho más probable. La suelta, debe ser simplemente dejándolo ir tras oxigenarlo, nunca revolear al pez. Y si estamos en un muelle o una barranca, bajarlo con mediomundo.
• 4 - Evitemos el consumo de descartables: Si hay repasadores de tela relavables y reutilizables o cantimploras que nos eviten el uso de servilletas y envases descartables, le estaremos haciendo un gran favor a la naturaleza. Muchos de esos elementos de “use y tire” son los que terminan en el agua y debemos procurar evitarlos.
• 5 - Evite la ceba en cursos de agua cerrados: Muchos pescadores en su afán de hacer capturas más fáciles tiran aceite de pescado al agua en una laguna para atraer pejerreyes, o enormes bolas de masa cebando para carpas en pequeños lagos. Tenga en cuenta que todo ese material orgánico deteriora la calidad de un agua no renovable.
• 6 - No a los contaminantes del agua: Colillas de cigarrillo y plomadas hechas de plomo son elementos que contaminan el medio acuático. En algunos ríos patagónicos como el Santa Cruz, los certámenes deportivos como la Fiesta de la Trucha Steelhead exigen que los pesos usados sean de tugsteno o de otros materiales no contaminantes, pero se prohíbe el plomo. La misma regla es válida para no dejar señuelos de látex que se nos rompen tras alguna captura. Evitemos tirar “gomas” al agua que pueden ser ingeridas por peces o aves, o contaminar el medio.
• 7 - Un eco- pescador respeta medidas mínimas de los peces a sacrificar y sigue las reglamentaciones sobre vedas de pesca deportiva en momentos en que la especie reproduce. También respeta aquellas zonas de importancia biológica en las que no se puede pescar permanentemente.
• 8 - Cuidado con el fuego: este consejo es compartido con cualquiera que haga camping o campamentos: tirar desaprensivamente una colilla de cigarro en un pastizal puede ocasionar un daño de consecuencias incalculables. Lo mismo vale para cuando se hace un fuego en un ambiente natural, para cocinar, calefaccionarnos o ahuyentar insectos. No deben quedar brazas expuestas. Apagar con agua y tierra cada hoguera es menester cuando dejamos el lugar.
• 9 - Ojo al trasvase de especies: Es frecuente que un pescador use carnada viva en sus pescas. Y que al finalizar la jornada, simplemente eche al agua los pecesitos y otras formas de vida sobrantes en la bolsa que le dio el vendedor. Pues bien, esto puede producir trasvases de especies (ya sea en estado larval o como alevinos o juveniles) de especies que el ámbito a pescar no necesita. Y estos seres pueden generar nuevas colonias allí donde no deben estar o simplemente portar enfermedades. No suelte entonces estos residuales en los cursos que visita.
• 10 - Sea ambientalista: hoy por hoy no basta solo con saber capturar peces y respetar ciertas normas de etiqueta y corrección ecológica. Sumarse a campañas tendientes a proteger nuestros cursos de agua es una gran medida, que podemos compartir con nuestros hijos. En varias partes del país se han organizado, como hicieron pescadores de Puerto Yeruá, jornadas para recoger basura en las islas. También ayuda votar en peticiones que apoyen causas nobles desde el punto de vista ambiental y hacerle saber a nuestros gobernantes y legisladores que todo progreso debe estar en armonía con el cuidado del ambiente, pasa a ser una necesidad si queremos seguir pescando. Cada vez somos más pescadores presionando los mismos cursos de agua, por lo que se impone la necesidad de ayudar a su preservación para hacer de nuestra actividad favorita, algo sustentable.

Por: Wilmar Merino